jueves, 31 de marzo de 2011

Derechos asertivos

Elige un derecho.

Cóncedete un derecho.

Concédeselo a los demás.

TODO EL MUNDO TIENE DERECHO…
(Tú… y el de enfrente)

·       A ser el primero algunas veces.
 (La madre que piensa en todos los de la familia antes que en ella: ropa, comida, tareas…)
·       A cometer errores.
 (No hay que torturarse uno mismo, ni a los demás, por equivocarse: “¡Mira que soy/eres/es tonto!”)
·       A tener sus propias opiniones y creencias.
 (Aunque no gusten a los demás o no sean convencionales)
·       A cambiar de idea, opinión o actuación.
 (Rectificar es de sabios. Todo el mundo se merece una segunda oportunidad por muy grave que sea lo que haya hecho o dicho. No se te va a tragar la tierra por dar tu brazo a torcer)
·       A expresar una crítica y a protestar.
(A mucha gente, le da miedo, y traga con lo que le echen. Otros lo dicen con educación, y no pasa nada)
·       A pedir una aclaración.
(Si no hemos entendido algo. El “no” o el silencio los tenemos de antemano)
·       A pedir ayuda o apoyo emocional
(No por ello somos débiles ni van a pensar mal de nosotros. Y si lo hacen, el problema lo tiene el otro por no ser comprensivo, no nosotros)
·       A sentir y a expresar dolor.
(¿Por qué los chicos no pueden llorar?)
·       A ignorar los consejos de los demás.
(Puede que tenga razón, pero que nosotros no podamos seguirlo en ese momento, o que prefiramos otra solución)
·       A recibir el reconocimiento por un trabajo bien hecho.
(Nunca me dicen que la comida está buena, sólo “aj, verdura”. Nunca me felicitan por hacer los deberes o poner la mesa, sólo me riñen cuando no lo hago)
·       A negarse a una petición, a decir NO.
(¿Por qué aceptaría esa invitación, o hacer ese favor o comprar ese trasto?)
·       A no justificarse ante los demás.
(No siempre hay que dar una explicación de lo que haces o por qué lo haces)
·       A responder, o no hacerlo.
(¿Cuántos años tienes? ¿Tienes novio/a? ¿Qué coche tienes? ¿Qué has hecho hoy?)
·       A ser tratado con dignidad.
(¿Acaso existe alguien que se merece el rechazo, la antipatía o incuso la humillación de los demás?)
·       A detenerse y pensar antes de actuar.
(No hay por qué contestar enseguida a las propuestas ajenas: DEJA QUE ME LO PIENSE)
·       A decidir qué hacer con su cuerpo, tiempo y propiedad.
(Siempre que sólo le afecte a él. Si quiere fumar a pesar de que es malo, y me respeta a mí, que fume)
·       A hablar sobre el problema con la  persona involucrada.
(A veces, cuesta, pero hablando se entiende la gente)
·       A hacer cualquier cosa, mientras no vulnere los derechos de otros.

Lista basada en las aportaciones de Raquel Palomera, de la UC

miércoles, 30 de marzo de 2011

Hazte amigo de tus emociones

En el curso que hice sobre Inteligencia Emocional de la Fundación Botín, nos dijeron una frase que me se me quedó grabada: "Hazte amigo de tus emociones".

Nos explicaron que cuando sientes una emoción, ya sea positiva o negativa, estás recibiendo una señal de tu cuerpo, y que es contraproducente luchar contra esa emoción, cosa que solemos hacer, especialmente, cuando son negativas. Es preferible aceptar lo que estamos sintiendo, buscar las razones que nos hacen percibir dicha emoción, y actuar en consecuencia. Por ejemplo, te pones nervioso o tienes miedo; en vez de luchar contra los nervios, o contra el miedo, es mejor pensar qué nos hace sentir así, y buscar los medios para sobrellevar dichas emociones: respirar, verbalizarlo, salir a dar un paseo, analizar la situación objetivamente...

Lo que ocurre es que no siempre identificamos las emociones que experimentamos. A veces, escarbando un poco en nuestro interior, nos damos cuenta de que unas emociones encubren a otras, que tal vez tú crees que estás enfadado, pero, en el fondo, lo que ocurre es que te sientes triste, o culpable, o tienes miedo... Seguro que cuando descubres la verdadera emoción que se oculta en tu interior, ya no te sientes tan enfadado. Por eso, merece la pena pararnos a escuchar nuestras emociones; por eso, es útil tener una lista a mano.

En el curso de autoconocimiento del Teléfono de la Esperanza, nos han facilitado esta, que me ha gustado mucho. La reproduzco en forma de ristra, porque no he encontrado otra manera de publicarla con este editor.

Si alguien está interesado en la tabla en un documento en PDF, que me deje su correo en los comentarios.

¿Cómo te sientes ahora mismo?

Feliz
Eufórico
Confiado
Entusiasmado
Alegre
Exaltado
Gozoso
Contento
Satisfecho
Orgulloso
Tranquilo
Relajado
Encantado
Ilusionado
A gusto
Comprendido
Aceptado
Animado
Débil
Impotente
Oprimido
Vacío
Inseguro
Vulnerable
Indeciso
Incierto
Vacilante
Humillado
Agotado
Cansado
Hundido
Impotente
Vacío
Aislado
Infravalorado
Flojo
Confuso
Desconcertado
Inquieto
Angustiado
Ridículo
Incómodo
Agobiado
Estresado
Incómodo
Desorientado
Sorprendido
Turbado
Incomprendido
Dudoso
Inseguro
Dubitativo

Triste
Desesperado
Deprimido
Amargado
Desmoralizado
Desalentado
Desganado
Herido
Resentido
Despreciado
Dolido
Culpable
Frustrado
Rechazado
Despechado
Engañado
Melancólico
Desanimado
Fuerte
Poderoso
Forzudo
Enérgico
Capaz
Decidido
Seguro
Optimista
Firme
Endurecido
Irresistible
Responsable
Violento
Hinchado
Útil
Firme
Terco
Enfadado
Furioso
Incómodo
Encolerizado
Airado
Irritado
Agresivo
Crispado
Fastidiado
Molesto
Irritado
Malhumorado
Cabreado
Siento odio
Rabioso
Indignado
Estafado
Violento
Asustado
Aterrorizado
Angustiado
Atemorizado
Inseguro
Ansioso
Temeroso
Disgustado
Intimidado
Horrorizado
Sin valor
Preocupado
Acobardado
Horrorizado
Lleno de miedo
Inquieto
Nervioso
Impaciente
Tabla de emociones de Carkuff

jueves, 24 de marzo de 2011

Primavera


Lirios en mi jarrón
 
Foto: Marian Alcázar


Lirio bello,
te alzas con elegancia
sobre el cristal.
Del envoltorio de tu tallo,
asoman tres campanillas
azules.
Las plumas que coronan
tu firmeza son
pájaros de vuelo seguro.

¿De dónde cogiste prestada
la intensidad de tu azul,
la suavidad de tu piel,
la perfección de tu forma?


¿Quién te inyectó
tu delicada fragancia?
¿Quién puso en tu boca azul
una lengua de fuego vivo?

Yo te recuerdo en las praderas
de Aguas Tuertas.
Asomabas entre hebras de hierba
y entre aguas subterráneas.
Saltabas de campo a campo,
cruzabas charcos traviesos.
Bailabas al son del viento
esquivando nuestros pasos.
Eras un regalo de la tierra,
del sol, del cielo, del aire.

Entonces, descubrí que
las floristas no tienen tu
exclusiva.
Tu delicadeza sobrevive en
las montañas.

Yo quiero atrapar tu verde tallo,
tu enhiesto talle.
Me quedaría para siempre
la transparencia de este pétalo
y la carnosidad de este otro.
Pero sé que, mañana,
el azul de tu cabeza y
el sol de tu fuego
serán sólo
recuerdos desteñidos
de mi memoria.

¡Vuela libre por los montes!
No envidies a las águilas
ni a los buitres.
Tu vuelo es suave y dulce,
a ras de tierra.

Blanca S.T.
Atrapando paisajes en la memoria
Primavera de 2002

miércoles, 23 de marzo de 2011

A tres metros sobre el cielo

No sé si conocéis el fenómeno "literario" de Federico Moccia. Si no es así, y tenéis hijos adolescentes, os aconsejo que os familiaricéis con él. Perdonad la extensión de la entrada, pero creo que merece la pena:

Ha escrito una serie de libros (la película sobre el primero, A tres metros sobre el cielo, se ha estrenado hace poco en España) que arrasan entre los adolescentes, bueno, creo que, sobre todo, entre las adolescentes.

Mis alumnas están empeñadas desde hace tiempo en que ponga uno de sus libros. Yo les dije que sin leerlo, ni loca, que si me dejaban uno, me comprometía a leerlo. Y, como me lo dejaron (A tres metros sobre el cielo), como llevo unos cuantos días de convalecencia por un virus, y como lo prometido es deuda... lo he leído. Y, aunque tiene poco valor literario, y no pienso recomendarlo jamás como lectura, me alegro de haberlo leído, porque creo que es importante saber cuáles son las referencias de los adolescentes, qué es lo que les llega. Me parece elemental ponernos en su lugar, para comprenderlos mejor.

Dicho esto, el libro me ha horrorizado, y me ha hecho reflexionar sobre la ética de su autor: una chica buena, de familia rica (viste de Valentino y esas cosas) y un chico malo, que está como un tren gracias a horas de gimnasio, que pertenece a una banda de gamberros con motos que se dedican a montar peleas allí a donde van, a robar, y a destrozar casas. La chica, al principio, lo aborrece, pero, previsiblemente, acaba cayendo rendida a sus pies, porque, en el fondo, el chico es así por acontecimientos que lo marcaron en el pasado.

De acuerdo, hasta aquí, es la típica historia, nada nuevo (Rebelde sin causa, Grease, West Side Story...) Lo malo es el ambiente que la rodea.
Primero, la violencia brutal del protagonista, y de sus amigos. La chica, que se supone que aborrece la violencia acaba encubriéndola, y justificándola (el chico le rompió la nariz sin ninguna razón a un conocido de los padres de ella, y en el libro lo ridiculizan), e incluso protagonizando su propia pelea. Los amigos son todos unos cafres, sobre todo, el mejor amigo de él, al que te lo imaginas como una auténtica bestia sin cerebro.
Segundo, el mundo "irreal" en el que viven, lleno de lujo: coches, ropa, relojes, motos, joyas, gafas, restaurantes, casas... Al principio, estuve a punto de dejarlo porque era una sucesión de una marca tras otra, la mayoría, desconocidas para mí. Además, llevan una vida secreta, en mi opinión, difícil de creer: engañan continuamente a los padres, se escapan por la noche, carreras ilegales, corren por la ciudad a 200 por hora, vuelven empapados en agua o en estiércol, o borrachos, y los padres ni se enteran... Vale, eso puedes hacerlo una noche de vez en cuando, pero, ¿todas? Claro, que podría ser si también nos creemos que sus padres se iban todas las noches a sus propias “juergas”...

Eso sin hablar de cómo se aborda la sexualidad. Sin entrar en moralizaciones, podía haber tenido el detalle de que los protagonistas usasen preservativo (no dice que no lo usasen, pero tampoco que sí)
Federico Moccia
Tercero, y, en mi opinión, lo peor: el mundo de los adultos. Un truco barato para ganarse el favor de los adolescentes. No salvan a ninguno. La familia de él, desestructurada. Los padres apenas aparecen ejerciendo como tales, y, si salen, es para quedar mal. Al hermano mayor, se le deja como a un “panoli”. Los padres de ella podrían tener puntos salvables, pero no se aprovechan. La madre es el estereotipo de mujer frívola y con temperamento fuerte, que sabe lo que quiere; el padre, un calzonazos con poco carácter, y con crisis de madurez. Las escenas del padre fantaseando con otras mujeres, especialmente, con una camarera que podría ser su hija, son vergonzosas. La profesora con mayor protagonismo es un bruja a la que se utiliza para presentar a la protagonista como una heroína ante todo el colegio, pero, en especial, ante su hermana pequeña, en una escena bochornosa que se podía haber resuelto sin tanta prepotencia por parte de la chica (claro que, si no, se queda sin pretexto para la trama posterior)

Al final, la chica le echa un discursito pseudomoralizante a la madre para justificar su propia conducta del todo inmoral. Se supone que esta es la excusa para la falta de ética que predomina en todo el libro: criticar la educación hipócrita que les han dado los padres. Pero es que llega a equiparar el valor evangélico de ayudar al prójimo con el perjurio en un juicio por agresión...

No sé si he conseguido explicarme bien. No es el clásico enfrentamiento entre padres e hijos, o la crítica a la falta de valores que imprimen los padres, que hay historias muy buenas (estoy pensando ahora en Historias del Kronen, por ejemplo). Es justificar los contravalores, incluso ensalzarlos, acogiéndose a la hipocresía de los padres ricos. Al final, los protagonistas pagan las consecuencias, pero, ¿de qué sirve si, a esas alturas, en su corazón, la adolescente que está leyendo el libro ya ha convertido a Babi en una heroína, y a Step, en el prototipo de hombre que espera encontrar?
Puede que, si habéis leído mi reflexión, muchos no queráis ni locos que vuestros hijos lean sus libros. Yo creo que si lo leen a una edad adecuada, si tienen unos valores claros, si saben distinguir que lo que leen es ficción, si no identifican el mundo de los adultos de la novela con el de su entorno, no hay mayor problema que una moda a seguir, y unos temas y unos personajes por los que todos nos hemos sentido atraídos en la adolescencia. Además, ya se sabe que lo prohibido es mucho más atractivo.

Pero, con todo esto, lo que quiero transmitir es que es fundamental saber lo que nuestros adolescentes leen (y ven), para estar prevenidos, y para poder conversar con ellos, y aclarar algunos puntos.

sábado, 19 de marzo de 2011

Padres e hijos



Father
It's not time to make a change,
Just relax, take it easy.
You're still young, that's your fault,
There's so much you have to know.
Find a girl, settle down,
If you want you can marry.
Look at me, I am old, but I'm happy.

I was once like you are now, and I know that it's not easy,
To be calm when you've found something going on.
But take your time, think a lot,
Why, think of everything you've got.

For you will still be here tomorrow, but your dreams may not.

Son
How can I try to explain, when I do he turns away again.
It's always been the same, same old story.
From the moment I could talk I was ordered to listen.
Now there's a way and I know that I have to go away.
I know I have to go.



Surgeons+at+work
'father and son'
http://www.flickr.com/


Father
It's not time to make a change,
Just sit down, take it slowly.
You're still young, that's your fault,
There's so much you have to go through.
Find a girl, settle down,
if you want you can marry.
Look at me, I am old, but I'm happy.
(Son-- Away Away Away, I know I have to
Make this decision alone - no)
Son
All the times that I cried, keeping all the things I knew inside,
It's hard, but it's harder to ignore it.
If they were right, I'd agree, but it's them They know not me.
Now there's a way and I know that I have to go away.
I know I have to go.
(Father-- Stay Stay Stay, Why must you go and

make this decision alone?)

Cambiar con las dificultades

untitled
'untitled'
http://www.flickr.com/
Hace tiempo que quería dejar aquí almacenado un cuento que oí hace unos meses, y que me gustó mucho.
El otro día, al leer estas bonitas palabras en el blog de Uno entre cien mil, me acordé nuevamente de él:

“Esto ha pasado para algo” y a partir de ahora “el camino se tiene que convertir en uno en el que todos podamos sacar algo positivo”. “No quiero que nadie recuerde esto como una pesadilla, lo que busco es que sirva para algo”.


“El nombre de Uno entre cien mil no es porque esto le ocurra a tres de cada cien mil niños, sino por darle la vuelta a ese concepto, Guzmán es un niño que va a superar esto como otros cien mil no tienen necesidad de hacer, y por eso en su vida sacará adelante lo que cien mil no puedan.”

“Este blog es una terapia, está suponiendo un asumir y aceptar pero con un construir positivo. El objetivo es que todos los que rodeamos a Guzmán construyamos palabras, pensamientos, un futuro y un presente positivo. Construir pilares sanadores. Que Guzmán vea en esto una historia de superación, una batalla que ha superado”.


La resiliencia, según la RAE, es la "Capacidad humana de asumir con flexibilidad situaciones límite y sobreponerse a ellas".

ZANAHORIAS, HUEVO, CAFÉ
Una hija se quejaba a su padre acerca de su vida y cómo las cosas le resultaban tan difíciles. No sabía cómo hacer para seguir adelante y creía que se daría por vencida. Estaba cansada de luchar. Parecía que cuando solucionaba un problema, aparecía otro.
Carrot+Flower
'Dinner'
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Su padre, un chef de cocina, la llevó a su lugar de trabajo. Allí llenó tres ollas con agua y las colocó sobre fuego fuerte. Pronto el agua de las tres ollas estaba hirviendo. En una colocó zanahorias, en otra colocó huevos y en la última colocó granos de café. Las dejó hervir sin decir palabra. La hija esperó impacientemente, preguntándose qué estaría haciendo su padre.
A los veinte minutos el padre apagó el fuego. Sacó las zanahorias y las colocó en un recipiente. Sacó los huevos y los colocó en otro. Coló el café y lo puso en un tercer recipiente. Mirando a su hija le dijo: "Querida, ¿qué ves?". "Zanahorias, huevos y café", fue su respuesta. La hizo acercarse y le pidió que tocara las zanahorias. Ella lo hizo y notó que estaban blandas. Luego le pidió que tomara un huevo y lo rompiera. Luego de sacarle la cáscara, observó el huevo duro. Luego le pidió que probara el café. Ella sonrió mientras disfrutaba de su rico aroma.

LOOKING+OUT+FROM+THE+OLD+SEA+CAVE+OF+ENOSHIMA+in+MEIJI-ERA+JAPAN++%E6%B1%9F%E3%81%AE%E5%B3%B6
'tumbled out'
http://www.flickr.com/

Humildemente la hija preguntó: "¿Qué significa esto, padre?". Él le explicó que los tres elementos habían enfrentado la misma adversidad: ¡agua hirviendo!, pero habían reaccionado en forma diferente. La zanahoria llegó al agua siendo fuerte y dura. Pero después de pasar por el agua hirviendo se había vuelto débil, fácil de deshacer.
El huevo había llegado al agua siendo frágil. Su cáscara fina protegía su interior líquido. Pero después de estar en agua hirviendo, su interior se había endurecido. Los granos de café sin embargo eran únicos. Después de estar en agua hirviendo, habían cambiado al agua.
"¿Cual eres tú?", le preguntó a su hija. "Cuando la adversidad llama a tu puerta, ¿cómo respondes? ¿Eres una zanahoria, un huevo o un grano de café?"
Coffe+Break+for+two
'Coffee Love (FI-20473)'
http://www.flickr.com/
Y hoy te lo pregunto yo a ti... ¿Cómo eres tú, mi querido amigo? ¿Eres una zanahoria que parece fuerte pero que cuando la adversidad y el dolor te tocan, te vuelves débil y pierdes tu fortaleza? ¿Eres un huevo, que comienza con un corazón maleable? ¿Poseías un espíritu fluido, pero después de una muerte, una separación, un divorcio o un despido te has vuelto duro y rígido? Por fuera te ves igual, pero... ¿eres amargado y áspero, con un espíritu y un corazón endurecido? ¿O eres como un grano de café? El café cambia al agua hirviente, el elemento que le causa dolor. ¡Cuando el agua llega al punto de ebullición el café alcanza su mejor sabor! Si eres como el grano de café, cuando las cosas se ponen peor... ¡tú reaccionas mejor! y haces que las cosas a tu alrededor mejoren. ¿Cómo manejas la adversidad? ¿Eres una zanahoria, un huevo o un grano de café? Piénsalo...
Fuente: http://www.crecimiento-personal.com

Esto es lo que comentaba una compañera de la UP, a la que la vida la ha puesto a prueba con una de las peores, después de leerlo:

Desgraciadamente, no tengo el truco para hacer ese café tan estupendo. Está claro que, ante la adversidad, no he conseguido nada más que ser primero una zanahoria frágil y fácil de deshacer, para, después, volverme un huevo endurecido. Confío que, con el tiempo, tenga la fortaleza necesaria para poder ser ese café capaz de conseguir que esa agua hirviendo, no le haga tanto daño.